Con la llegada del calor y la subida de las temperaturas empezamos a pensar en el verano, y con él, en el aire acondicionado. En verano aumenta de manera considerable el consumo energético, por eso, en este artículo hemos recogido algunos consejos que nos ayudan a consumir menos luz y contaminar menos.
En el caso del aire acondicionado, se recomienda usarlo en breves periodos de tiempo y por las noches, utilizar la opción de programar el aparato para que se apague durante la madrugada.
El proceso del calentamiento de agua es uno de los mayores factores de consumo de energía, igual ocurre con los calentadores eléctricos. En verano, las duchas frías y cortas nos ayudan a disminuir el consumo. Por otro lado, la secadora debemos usarla para casos absolutamente necesarios. En estas fechas, se recomienda aprovechar el calor y las largas horas de sol para tender nuestra ropa.
Por otra parte, se recomienda apurar las horas de luz solar abriendo las ventanas para alumbrarnos con luz natural.
Por último, debemos aprovechar “las horas de consumo económico”. En verano, este horario suele comprenderse entre las 23.00h y las 13.00h del día siguiente. Por ello, durante esta franja horaria, se recomienda utilizar electrodomésticos de alto consumo como lavadoras.